Como nos afecta el cambio horario en la salud 

Claves para sobrevivir al cambio horario
Claves para sobrevivir al cambio horario
Como afecta el cambio horario en nuestras vidas

 

El debate sobre los trastornos que el cambio horario pueden producir en nuestro organismo y salud se repite cada año cuando adelantamos o atrasamos los relojes. Lo cierto es que la sociedad se pone en movimiento en función del sol. Cuando no había relojes se hacía de forma natural, ya había horarios de verano e invierno.

Si esta norma da origen a polémicas, en España resulta aún más, puesto que ni siquiera tenemos el huso horario que nos correspondería, que es el del meridiano de Greenwich, el mismo que Inglaterra o Portugal. Lo curioso es que volver al horario que nos correspondería sería muy sencillo. Bastaría con no hacer nada. Cuando los demás países adelantan el reloj en marzo para ponerlo en horario de verano, si no lo hacemos, nos equipararíamos de nuevo al horario de Greenwich. Dado que el cambio de verano resulta más perjudicial que el de invierno, adoptar nuestro uso sería un alivio para nosotros.

 

A pesar de que ya es una práctica habitual el cambio horario dos veces al año, no deja de tener implicaciones en la salud y bienestar.

 

En el cuerpo humano hay neuronas que funcionan como relojes y que mandan señales de forma periódica para establecer unos ciclos circadianos, es decir, de alrededor de un día, el más importante está en el cerebro pero existen cientos de pequeños relojes localizados en los órganos y células de nuestro cuerpo, todos controlan las funciones a nivel local, por ejemplo, hacen oscilar nuestra temperatura corporal o activan nuestro intestino. Pero aparte de varios relojes internos, el organismo cuenta con mecanismos para “poner en hora” estos relojes y ajustarlos al ambiente. Estos son, por ejemplo, la luz solar y los estímulos externos, como los horarios de las comidas, la actividad física  o los horarios de sueño.

 

¿Qué pasa entonces si a este reloj le imponemos un adelanto o retraso de una hora? ¿Afecta esto a nuestro ritmo biológico?

 

Efectivamente, el cambio de hora afecta a nuestro ritmo de sueño y como consecuencia a nuestra salud, no afecta a todas las personas por igual, sobre todo sufren estas consecuencias los ancianos y niños. En estos grupos de personas, al cambio horario su reloj biológico puede tardar en ajustarse varios días, incluso una o dos semanas.

Pueden aparecer trastornos en el sueño, cambios en los hábitos alimenticios y en el estado de ánimo que traen consigo la sensación de fatiga, cansancio, irritabilidad o falta de concentración, ansiedad.

 

trastornos de los cambios horarios
Los niños y los ancianos son más vulnerables a los cambios horarios

 

¿Qué se puede hacer para que no afecte el cambio horario?

 

El cambio de hora podemos manejarlo con unas claves para que no interfiera, o lo haga mínimamente, en nuestra  salud y bienestar:

 

  • No cambiar bruscamente la hora de acostarnos y levantarnos. Ayuda el ir haciéndolo de forma escalonada.
  • No dormir siesta para combatir el cansancio, sobre todo si no es hábito, ya el reloj interno se alterará más.

Aprovechar la luz solar para que los rayos solares aporten sus beneficios a la salud. A mayor cantidad de luz solar, mayores niveles de serotonina y mejor estado de ánimo. Cuando se hace el cambio horario de invierno anochece antes y puede que el estado de ánimo se vea afectado negativamente. La exposición a la luz natural nos ayuda a mantener también el ciclo de sueño y vigilia, ya que el nervio óptico, durante las horas de sol, envía un mensaje a la glándula que produce melatonina, una hormona asociada con la aparición del sueño. Esta glándula segrega menos cantidad de melatonina durante las horas de luz y cuando comienza a anochecer se inicia un aumento de producción por lo que se pueden descompensar los ciclos de sueño-vigilia.

 

Alteración en el reloj biológico
El cambio horario puede causar trastornos en el ciclo sueño-vigilia
  • Hacer ejercicio, aunque parezca contradictorio, hacer ejercicio nos dará energía para acabar mejor la jornada y ayudará a estabilizarnos.
  • Cenar ligero ayudará a conciliar el sueño, evitemos la cafeína y el alcohol.
  • Los alimentos ricos en triptófano (huevos, leche, chocolate, carne, pescado (atún y salmón especialmente) frutas como el plátano, legumbres y verduras como la calabaza) nos ayudaran a minimizar el insomnio.

 

Estos consejos ayudaran a una transición tranquila hacia el nuevo horario que la salud lo agradecerá. De todas formas no deja de ser un trastorno leve que no genera grandes problemas y que en pocos días normalmente se produce una adaptación.

 

Sin embargo, como las quejas por el cambio horario por parte de los ciudadanos por los efectos negativos para la salud y el sueño sobre el cambio horario cada vez se hacen notar más y dado también que los últimos estudios realizados apuntan a un ahorro mínimo de energía, la Comisión Europea ha propuesto no seguir regulando el cambio de hora y que, después del cambio a horario de verano (el último domingo de marzo de 2019) cada estado miembro elija si sigue cambiando la hora y de no hacerlo con qué hora se queda. Así que es posible que esta sea la última vez que el cambio horario de invierno.

 

Que el «Jet Lag» no arruine tus vacaciones

Cruzando varias franjas horarias se sufre el Jet Lag
Cruzando varias franjas horarias se sufre el Jet Lag

El Jet Lag puede influir en el bienestar de tus vacaciones.

Llegan las vacaciones y muchos ya estaréis con la ilusión de los preparativos para iniciar un viaje a un lugar deseado. Posiblemente tomemos un vuelo y embarquemos a lugares con diferentes husos horarios.

¿Qué significa esto?

Los husos horarios son cada uno de los 24 sectores esféricos en que el hombre ha dividido la superficie de la tierra. Resultan de repartir los 360º de la esfera terrestre, entre las 24 horas que invierte en dar una vuelta completa sobre su propio eje. Cada huso horario mide 15º (360º/24 horas =1hora). Para señalar cuando empieza y cuando acaba la rotación de la tierra, se han guiado del momento que hay menos sombra y los rayos del sol caen más perpendiculares sobre la tierra, se llama mediodía, son las 12 de la mañana. No es la misma hora en todos los países porque los rayos del sol no caen perpendicularmente sobre todos los países a la vez. El huso horario en el cual comienza la cuenta es aquel que se encuentra en mitad del planeta y el meridiano 0 o de Grenwich, a partir de él se añade una hora por cada huso horario que se recorra hacia el este y se resta una hora por cada huso que se recorra hacia el oeste.

Es por esto que no es la misma hora en un mismo momento en todos los países..

Cuando viajamos atravesando varios meridianos o husos horarios se manifiesta el temido compañero de viaje el Jet Lag. Sucede porque nuestro cuerpo tiene un reloj biológico que se llama “ritmo circadiano”, es el que regula el ciclo de sueño-vigilia, se ve alterado y tarda en adaptarse al nuevo horario que impone el país de destino.

El ritmo circadiano depende de las horas de luz y la oscuridad, en las horas de oscuridad se libera la melatonina, hormona que ayuda a conciliar el sueño, la luz interfiere en el funcionamiento natural de este proceso. El reloj biológico no estará sincronizado con el horario local, y es posible que nos sintamos adormilados durante el día y despiertos por la noche.

Este problema se produce sobre todo si viajamos de oeste-este, si es al contrario normalmente disminuyen o no existen. Si se viaja de norte a sur (sin traspasar zonas horarias), el jet lag no se manifiesta, como tampoco si se utiliza como medio de transporte barco o autobús.

Cuanto mayor sea la diferencia horaria, mayor será la probabilidad de manifestarse el Jet Lag.

Los síntomas no se reducen al insomnio, es un desajuste de horarios que afecta a todo el organismo: temperatura corporal, tensión arterial, , coordinación, reflejos, tránsito intestinal, , bajo rendimiento intelectual, alteraciones en el estado de ánimo, todo esto trae consigo un malestar general que no permite estar en plenas condiciones.

Los síntomas suelen comenzar entre el primer y segundo día en el lugar de destino, van disminuyendo paulatinamente aunque en determinados momentos del día son más fuertes.  Pueden durar entre 2 y 6 días, a veces puede prolongarse más dependiendo de la lejanía del país y de la persona, que sea más propensa o menos o su poder de adaptación más alto o menos. Las personas mayores (+de 50 años) y las normalmente madrugadoras, sus síntomas son más pronunciados. Los que vuelan habitualmente, lejos de acostumbrarse son más susceptibles.

¿ Se puede evitar estos síntomas?

El Jet Lag se soluciona por sí mismo, aunque lentamente. Podemos valernos de algunos consejos terapéuticos para que incida lo menos posible en nuestro bienestar.

Algunos trucos para evitar el Jet Lag los puedes poner en práctica antes de viajar, otros durante el vuelo, y otros al llegar a destino.

Antes de viajar:

Comienza a adaptarte al nuevo unos días antes ( si tu destino es más tarde, acuéstate más tarde que de costumbre. Si el destino es más temprano, acuéstate y despiértate más temprano).

Paulatinamente vete cambiando tus hábitos alimenticios, adelantando o retrasando la hora según sea en el país del destino.

Duerme bien la noche anterior del vuelo, un mínimo de 7 horas. Un cuerpo descansado se recuperará más fácilmente y con mayor rapidez para superar la falta de equilibrio que supone el Jet Lag.

Durante el vuelo:

Al montarte en el avión cambia tu reloj a la hora del lugar de destino.

Siempre que sea posible viaja de noche, es más sencillo ajustar el horario interno a la llegada.

Intenta dormir durante el vuelo, no olvides tener a mano los elementos que necesites, como almohada, antifaz, tapones de oído, manta.

Como reducir los efectos del Jet Lag
Como reducir los efectos del Jet Lag

Reduce el consumo de cafeína, ayudará a mantenerse despierto pero afectará a los patrones de sueño.

Evita el alcohol, lejos de relajar, aumenta la sensación de descanso.

Bebe mucha agua aunque no tengas sed, con ello conseguirás tener una buena hidratación.

Levántate de vez en cuando del asiento y mueve un poco las piernas para facilitar la circulación.

Después del vuelo:

Muy recomendable hacer algo de ejercicio para estirar músculos después de un vuelo largo y poner en acción las endorfinas para lograr bienestar.

No duermas al llegar,  si no es hora en el nuevo destino, sal a la calle y exponte a los rayos del sol lo más posible.

Adapta los horarios de comidas a los del destino lo antes posible.

Si es necesario podemos ayudarnos con medicamentos, la melatonina puede ayudarnos a adaptar más rápidamente nuestro reloj interno pero es conveniente consultar con el médico ya que tiene contraindicaciones.

Comienza tus vacaciones sin el Jet Lag
Comienza tus vacaciones sin el Jet Lag

Siempre pensando en el buen descanso, desde ColchonVip os deseamos un buen viaje y unas maravillosas e inolvidables vacaciones……!!!

¿Se puede dormir bien con el trabajo nocturno?

Existen trabajos nocturnos necesarios para el bien de la sociedad
Existen trabajos nocturnos necesarios para el bien de la sociedad

¿Dormir bien es posible trabajando por la noche?

Los seres humanos somos en general diurnos, nuestro cuerpo está preparado para ello. Para dormir bien la actividad laboral debería realizarse durante el día para lograr una coincidencia entre actividad laboral y actividad físiológica. Sin embargo son muchos los trabajadores que prestan su servicio a la comunidad mientras el resto dormimos, personal sanitario, vigilantes de seguridad, policías…etc. El trabajo nocturno es necesario en muchos casos y con cambios de turnos en muchos de ellos.

Esto repercute en el organismo, lo ideal para dormir bien sería trabajar de día y dormir de noche. ¿Es capaz el cuerpo humano de acostumbrarse a trabajar por la noche, puede el hábito hacer que se adapte a ello y conseguir dormir bien?

La existencia de efectos negativos sobre la salud de los trabajadores es una realidad, los ritmos biológicos naturales programados para trabajar durante el día y descansar durante la noche se ven alterados, dormir bien tiene sus inconvenientes.

El ciclo de sueño –vigilia que se repite en nuestras vidas está regido por un “reloj biológico” interno que nos dicta cuando despertar y cuando dormir. A este ciclo se le denomina ciclo circadiano y abarca 24 horas y son los más afectados.

Estos ritmos biológicos coinciden con los estados de vigilia y sueño, siendo la mayoría de ellos más activos durante el día que durante la noche.

Los trabajadores nocturnos sufren inconvenientes para dormir bien
Los trabajadores nocturnos se ven afectados por los cambios del ritmo biológico

Al cambiar los ciclos sueño/vigilia, estos ritmos se desequilibran, pero recuperan la normalidad cuando se vuelve a un ciclo normal. Esto obliga a estos trabajadores a cambiar su ciclo normal de actividad-descanso, obligándole a ajustar sus funciones al periodo de actividad nocturna. Esto acarrea un cambio en las funciones corporales, que aumenta con el número de noches trabajadas, pero que no llega nunca a ser completo, mostrándose dificultades para conseguir dormir bien. Las alteraciones son debidas a la estabilidad de estos ritmos y a su dificultad para adaptarse a modificaciones externas. De hecho el cuerpo está sometido a una tensión continua en su intento de adaptarse al cambio de ritmo.

Sobre si es el cuerpo humano es capaz de acostumbrase a estos cambios, son muchos los estudios que se han llevado a cabo en este tema, sin embargo la investigación no es del todo concluyente. El hábito efectivamente va haciendo que el cuerpo se acostumbre a ello aunque no todas las personas tienen el mismo poder de adaptación. Lo que parece claro es que el trabajador a turnos está menos satisfecho en su trabajo que los que gozan de un horario fijo. Así mismo, es comúnmente aceptado que el trabajo a turnos y sobre todo el nocturno, crea problemática humana con efectos sobre la salud y la vida social y familiar del trabajador.

¿El descanso durante el día no es entonces tan reparador como el de la noche, resulta contraproducente, dormir bien es posible?

Existe un mayor riesgo de algunas enfermedades como las cardiovasculáres, puede que las personas que se adaptan mejor no sufran efectos a largo plazo y otras que les resulte más difícil la adaptación y son más propensos.

El descanso efectivamente no es igual de reparador y existen alteraciones del sueño en muchos casos, derivadas de este cambio de ritmo biológico. Para garantizar el descanso y la recuperación de la fatiga diaria, se deberían respetar 7 horas de sueño nocturno de manera que puedan darse todas las fases del sueño y se facilite la recuperación física, durante las primeras horas de sueño, y la recuperación psíquica en las horas posteriores. Esto no puede darse en el trabajo por turnos porque el sueño se ve alterado, no produciéndose nunca una adaptación plena al cambio horario. Estos trabajadores a turnos suelen dormir entre 1 y 4 horas menos que el resto.

No hay que olvidar nunca que la biología del ser humano es diurna, y que el trabajo a turnos supedita la naturaleza a la organización del trabajo.

¿Se puede hacer algo al respecto para conseguir paliar estos efectos negativos y conseguir dormir bien?

Como los mayores problemas de los trabajadores nocturnos están relacionados con las alteraciones en el sueño y sus consecuencias, la mayoría de recomendaciones están orientadas a tener un buen descanso.

Es aconsejable mantener un horario regular de sueño y vigilia incluso los fines de semana o días de descanso. El tiempo destinado debe ser como mínimo 7 horas de sueño ininterrumpidas. Cuando el trabajo es a turnos es más complicado, se trata de ajustarlo lo más posible, por ejemplo al salir de los turnos de noche, tener un corto sueño al llegar a casa y acostarse por la noche un poco antes. En definitiva marcar un horario de sueño adecuado y tratar de mantenerlo.

El trabajo a turnos crea más problemática para dormir bien
El trabajo a turnos crea más problemática de adaptación

Una vez terminado el trabajo la prioridad es el descanso, es importante acostarse al acabarlo, en el camino de vuelta a casa el poner gafas de sol ayuda al cerebro a aumentar la producción de melatonina y es necesario organizar la vida de acuerdo al horario de sueño y no al revés

Llegados a casa sin demora en el tiempo hay que acostarse y la habitación tiene que reunir todos los requisitos que en la noche, la oscuridad, el silencio, la temperatura. Si existe riesgo de que el sueño se vea interrumpido por ruidos o luz, existe la opción de poner tapones en los oídos y un antifaz para conseguir la oscuridad total.

Si no se consigue dormir bien y lo suficiente se puede echar una siesta como de 45 minutos antes de ir al trabajo, ayudará a mantener el estado de alerta óptimo y una mayor concentración.

Si existe la posibilidad a mitad de la noche de echar otra pequeña siesta también reconfortaría y se llegaría al final de la jornada en mejores condiciones.

Después de dormir las horas recomendadas ya se puede programar las actividades que se deseen, es necesario este orden. Hay que organizar la vida de acuerdo al horario de sueño y no al revés. El sueño es primordial, de él va a depender la salud y bienestar de la persona.

(Alguna información ha sido recabada del Gabinete de salud laboral de CC.OO de Castilla La Mancha)