La Organización Mundial de la Salud define la actividad del fisioterapeuta como” la ciencia del tratamiento por medio de métodos físicos, ejecución de ejercicio terapéutico, electroterapia y masoterapia.
La fisioterapia es una rama de la ciencia de la salud dedicada a garantizar el correcto desarrollo o recuperación de las funciones referentes a los sistemas del cuerpo humano, cuya acción repercute en la cinética corporal..
El trabajo principal del fisioterapeuta es la rehabilitación o recuperación de lesiones en los pacientes.
Los profesionales del descanso nos encontramos muchas veces en la situación de responder a dudas de clientes sobre cuál será el colchón adecuado, el que más les ayude a tal o cual dolencia.
Desde ColchonVip siempre decimos que el colchón no va a curar una problemática de la espalda, pero si es cierto que la puede mejorar, aliviar y también la puede agravar.
En una palabra, el colchón puede ser nuestro fisioterapeuta nocturno, y es por eso que descansemos en un colchón adecuado a nuestra morfología y que nos ofrezca un buen soporte y confort. Esto nos evitará dolores musculares, de espalda o de cuello.
El colchón, la almohada y la postura que adoptemos para dormir van a contribuir en gran medida a evitar posibles problemas como tensiones musculares, crevicalgias, dolores dorsales y lumbares, pinzamientos nerviosos y alteraciones de las curvas fisiológicas de la espalda, dolencias que cada vez más se dan, y no solo entre las personas adultas, cada vez son más comunes entre gente cada vez más joven. A esta conclusión se ha llegado desde el Colegio de fisioterapeuta.
¿Y cómo saber cuál es el colchón adecuado? No existe el colchón perfecto para todos. Cada persona tiene una morfología y patologías diferentes, aparte también de los gustos y preferencias personales de cada cual. Es por ello que profesionales de la salud junto con profesionales del descanso han elaborado unos principios básicos para tener en cuenta.
Para elegir el colchón debemos tener en mente ciertas características de nuestro cuerpo…peso y altura primordialmente. Pero también nuestra forma de dormir.
El colchón debe adaptarse a nuestro cuerpo, manteniendo la columna recta y no al revés. El colchón debe medir 15cm. más que la persona, y cuantos más altos seamos y más pesemos, más firme debe ser el colchón para soportar adecuadamente el cuerpo y no producir hundimientos excesivos.
La postura que adoptemos al dormir también puede ser clave para propiciar dolores de espalda. Saber dormir bien es una de las claves para evitar que los dolores de espalda, ya sean musculares o articulares, se conviertan en una constante.
Las posturas al dormir son un tema ya tratado en nuestro Blog y que podéis consultar si lo creéis necesario.
Respecto al colchón, es hora de desterrar la idea de que uno duro es el mejor. O también lo contrario, uno que sea acogedor y blandito.
Un colchón excesivamente blando provoca que se hunda más y afecta a la curvatura de la columna vertebral. Además podría envolver demasiado a la persona, limitando sus movimientos, lo que provocaría otras patologías.
Y si es excesivamente duro ejerce demasiada presión en los puntos de apoyo del cuerpo, hará que la zona lumbar y dorsal quede descompensada.
Lo ideal, salvo excepciones, para la mayoría de las personas es un colchón de firmeza medía, tirando un poco a firme. Esto es lo que desde el gremio de fisioterapeuta nos aconsejan.
Y resta solamente darle la importancia que merece a la almohada, o almohadas, lo ideal sería disponer de tres y que en el artículo relacionado con las posturas al dormir os explicamos cómo colocarlas. Para elegir la adecuada, debe asegurarse que el cuello quede alineado con el resto de la columna en la postura en la que habitualmente dormimos.
Elegir la almohada además es fundamental para evitar presiones cervicales y también mandibulares, y para mantener la espalda y el cráneo recto, aspectos esenciales para garantizar un buen descanso, según advierten los fisioterapeutas. Cuanto más débiles sean las cervicales de una persona, más importancia tendrá, para que la almohada haga un buen soporte del cráneo con la columna.
Es importante tener estos factores y seguir el consejo de un buen profesional del descanso a la hora de seleccionar el colchón y la almohada que mejor se adapte a las necesidades de cada persona. La mala elección puede ser el causante de dolores de espalda y lesiones que empeorar la calidad de vida.